En los últimos años, el método “barefoot” o descalzo en caballos ha ganado popularidad entre veterinarios, herradores naturales y propietarios que buscan una alternativa más saludable y natural al herrado tradicional. Aunque la práctica de herrar caballos data de hace siglos, el movimiento barefoot plantea que, en muchas circunstancias, los caballos pueden y deben vivir sin herraduras, siempre y cuando reciban el cuidado adecuado. Este enfoque se basa en el principio de que el casco del caballo está diseñado para funcionar sin hierro, adaptándose naturalmente al terreno y fortaleciendo su estructura con el uso y el movimiento.
¿Qué es el barefoot?
El término “barefoot” hace referencia al mantenimiento de los caballos sin herraduras metálicas, permitiendo que sus cascos se mantengan descalzos. Para que este enfoque sea exitoso, se requiere una atención específica al recorte del casco, una alimentación equilibrada, ejercicio adecuado y un entorno que favorezca la salud natural del pie. Es importante entender que el barefoot no significa simplemente quitar las herraduras y dejar el casco a su suerte, sino que implica una transición guiada y un mantenimiento regular por parte de profesionales capacitados.
Fundamentos del movimiento barefoot
Los defensores del barefoot argumentan que el herrado tradicional, aunque útil en ciertas situaciones, puede provocar una serie de problemas a largo plazo, como:
-
Disminución de la circulación sanguínea en el casco.
-
Atrofia del tejido interno del casco.
-
Sensibilidad o dolor crónico.
-
Pérdida de funcionalidad natural del pie.
Por el contrario, el enfoque barefoot busca restaurar la biomecánica natural del casco, permitiendo que las estructuras internas como el cojín digital y la ranilla trabajen correctamente, absorban impactos y estimulen la circulación. Esto puede traducirse en cascos más fuertes, menos propensos a infecciones como la podredumbre de la ranilla o los abscesos, y una locomoción más fluida.
Beneficios del barefoot
-
Mejor salud del casco: Los cascos descalzos, bien recortados y mantenidos, pueden desarrollar una forma más natural, con una ranilla activa, una muralla fuerte y una suela funcional.
-
Reducción de lesiones: Al permitir que el casco se expanda y contraiga de forma natural, se reduce el riesgo de lesiones relacionadas con el impacto, como las laminitis o las naviculares.
-
Mayor sensibilidad y tracción: Un casco descalzo puede adaptarse mejor a distintos terrenos y ofrece una tracción más natural, útil en superficies variadas.
-
Menor costo a largo plazo: Aunque requiere mantenimiento regular, el barefoot puede ser más económico que el herrado periódico, eliminando el coste de las herraduras y su colocación.
La transición al barefoot
No todos los caballos pueden pasar de herrado a descalzo de inmediato. La transición debe ser progresiva y personalizada, dependiendo de factores como la edad del caballo, la conformación del casco, el tipo de terreno donde vive, su historial de salud y el uso que se le da (deportivo, recreativo, etc.).
Durante este proceso, pueden presentarse momentos de sensibilidad o incomodidad, especialmente si el casco estaba deformado o débil por el uso prolongado de herraduras. Para apoyar la transición, se pueden utilizar botas de casco (hoof boots), diseñadas para proteger el pie mientras se fortalece. Además, es fundamental contar con la asesoría de un profesional especializado en recorte natural, que comprenda la anatomía y fisiología del casco equino.
Alimentación y ambiente
Una parte esencial del éxito del barefoot es el manejo holístico del caballo. La alimentación debe ser baja en azúcares y almidones para evitar inflamaciones que afecten el casco. Dietas altas en forraje, con acceso controlado a pasturas, y suplementación de minerales como zinc, cobre y biotina, pueden ser beneficiosas.
El ambiente también desempeña un papel crítico. Un caballo que vive en un terreno variado, con superficies abrasivas como grava, tierra dura o piedra, desarrollará un casco más resistente que uno que vive en suelos blandos o húmedos constantemente. El movimiento constante también es vital: cuanto más camina un caballo, más estimula la salud del pie.
¿Es para todos los caballos?
Aunque muchos caballos pueden beneficiarse del barefoot, no todos los casos son adecuados. Caballos con problemas ortopédicos severos, deformidades, o aquellos que realizan actividades de alto impacto en superficies duras pueden requerir herraduras correctivas o protectoras. Lo importante es reconocer que el barefoot no es una solución universal, sino una opción válida dentro de un enfoque individualizado de bienestar animal.
Conclusión
El barefoot en caballos representa un cambio de paradigma hacia una visión más natural y holística del cuidado equino. Al centrarse en la funcionalidad del casco y su conexión con la salud general del animal, este método puede ofrecer grandes beneficios físicos y emocionales para el caballo. Sin embargo, como toda técnica, debe ser aplicada con conocimiento, compromiso y el acompañamiento de profesionales cualificados.
Para los propietarios interesados, es clave informarse, observar a su caballo de cerca y colaborar con expertos que prioricen el bienestar antes que las modas. En última instancia, cada caballo es único, y lo más importante es elegir la opción que mejor respete y promueva su salud integral.